Después de ir de Hoi An a la estación de Da Nang, tomo el tren nocturno a Saigón, la antigua capital del Sur, actualmente llamada Ciudad Ho Chi Minh, aunque sólo oficialmente, por que hasta en el billete de tren pone Saigón. Muchos kilómetros y muchas horas en un coche cama abarrotado de paisanos y bultos. Mi última etapa en este bello país que es Vietnam.
Consigo un hueco entre las maletas e intento pasar las horas tranquilamente, aprovechando que la cotilla, perdón, amable curiosa de mi vecina se duerme
Llego por la mañana a la estación y me voy caminando a buscar el hotel. Me gusta patear las ciudades y ver su ambiente
Parece una ciudad más moderna y dinámica que Hanoi. Se nota una mayor influencia occidental en el sur, incluyendo el turismo y el consumismo.
Se ven modernos rascacielos y mucha actividad inmobiliaria, espero que no metan la pata
Llego sin perderme a Pham Ngu Lao, el barrio donde está mi hotel. Una típica zona comercial y turística, por lo que veo
Al fin lo encuentro, éste es mi callejón, todo el barrio está lleno de callejuelas
Y en el callejón mi peluquería favorita. Ya me hacía falta un corte, entro, señalo mi pelo y hago el gesto de las tijeras, la señora me señala el asiento y ¡zas!, al cabo de un rato salgo con un buen corte de pelo por menos de dos euros. Si sonrío y me estiro los ojos, hasta parezco un vietnamita.
Me paso los casi tres días callejeando. Aquí vemos a los alumnos de un centro en el descanso del mediodía, muchos comen en grupos en los puestos callejeros. Me llama la atención que casi todos tienen buen aspecto, se les ve sanos y atléticos, es normal verlos jugar y hacer deporte en equipo en calles y parques, al contrario que en España, donde la mayoría se nos han vuelto sedentarios
Ayuntamiento. Edificio colonial francés
Hotel Rex, de los años veinte. Utilizado durante la guerra por los USA para sus oficiales. Desde 1986 vuelve a ser hotel
Otra muestra de Art Deco
El Teatro
Edificio de Correos, de Eiffel
Interior del edificio, con un retrato de Ho Chi Minh al fondo
Notre Dame
Y otra vez la pasión por los reportajes de novios. Parece una epidemia.
Estudiantes de arte dibujando en la calle.
Antiguo palacio presidencial de Vietnam del Sur, hoy palacio de la Reunificación
Fotografía famosa de 1975. Los tanques norvietnamitas entrando en el palacio. Fin de la guerra.
Trofeos de guerra. Por todas partes se exhibe material militar capturado tras la caída del sur.
Conservatorio de música (creo)
Una vuelta por el parque Toa Dan
Templo dentro del parque
Tambor. Por aquí diríamos barril de vino.
Tai Chi en el parque
El héroe histórico
Secando la colada
Publicidad institucional del régimen a orillas del río Saigón.
Embarcaciones del río
Esta es horrorosa (en mi opinión).
Uno de los canales del río
Puente de Eiffel.
Amigos en el puente al salir de clase.
Noches de Saigón. Mi callejón.
Pinchitos en la calle. Están muy ricos.
Risas
NOCHES DE SAIGÓN
Ho Chi Min, vieja Saigon a la que todos siguen llamando Saigon, sentado en una terraza tomando un café vietnamita a precio de turista, oyendo cantar a Dylan, viendo pasar gente, coches y, sobre todo, motos en esta calurosa y húmeda noche del otoño, en aquella ciudad de aquella lejana guerra que "viví" en la televisión en blanco y negro en mis primeros años.
Aquella guerra en la que los americanos luchaban por "defender el mundo libre de la amenaza comunista", aquella ciudad que cayó en manos de los comunistas en el 75, mientras todos huían en barcos y helicópteros. Recuerdo las escenas en televisión, los helicópteros ya no disparaban, sólo huían hasta los barcos para ser después arrojados al mar. El mundo libre vencido.
Veo una ciudad viva, ruidosa, llena de luces, de comercios, de publicidad, de gente con ganas de vivir y prosperar, ...llena de turistas occidentales. Ya no hay soldados americanos con armas, ahora hay turistas con dinero. Todos sonríen, todos contentos, vietnamitas y turistas. Veo muchas jóvenes y guapas vietnamitas abrazadas y alternando en las terrazas y calles con occidentales sin uniforme. He perdido la cuenta de las veces que me han ofrecido masajes y "ladies". Se decía que Saigon era el gran prostíbulo de los 60 y 70.
Los americanos quisieron ganar la guerra con hombres, armas y dinero. Se equivocaron, sólo necesitaban dinero... Y tiempo.
La música de Dylan me ha llevado cuarenta años atrás.
¿Quién ganó la guerra?
Terraza de la embajada USA, 1975. Desbandada y miedo.
Haciendo sitio en los barcos, los helicópteros ya no sirven.
Esperando en el motocarro.
Mi último día en Vietnam antes de volar a Estambul. Ultimas fotos mientras como en una terraza.
Unas cervezas entre masaje y periódicos.
Pensativa
La vendedora
El helado.
Good morning, Vietnam.
Bye, bye, Vietnam.
Vietnam está para mí asociada a los horrores de la guerra presentados por películas como "La Chaqueta Metálica", pero también por la influencia francesa en la antigua Indochina. Las imágenes dan una idea de la vitalidad actual y asombra la capacidad de recuperación de su gente.
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